Cáncer de vejiga: cuando sus células crecen sin control

El cáncer de vejiga es un tipo de cáncer que se origina cuando las células en la vejiga urinaria (un órgano hueco en la pelvis con paredes musculares flexibles) empiezan a crecer de manera incontrolable. A medida que se desarrollan más células cancerosas, pueden formar un tumor y propagarse a otras áreas del cuerpo.

Su función principal es almacenar la orina antes de que salga del cuerpo. La orina es producida por los riñones y luego es llevada a la vejiga a través de tubos llamados uréteres. Al orinar, los músculos de la vejiga se contraen y la orina sale de la vejiga a través de un tubo llamado uretra.

La pared de la vejiga tiene varias capas que se componen de diferentes tipos de células.

La mayoría de los casos de cáncer de vejiga comienzan en el revestimiento más interno de la vejiga, que se llama urotelio o epitelio de transición. A medida que el cáncer crece hacia, o a través de, las otras capas en la pared de la vejiga, se vuelve más avanzado y puede ser más difícil de tratar.

Con el tiempo, el cáncer puede crecer fuera de la vejiga y hacia estructuras cercanas. Asimismo, puede propagarse a los ganglios linfáticos cercanos o a otras partes del cuerpo.

Hay un tipo más común de cáncer de vejiga:

• Carcinoma urotelial (también conocido como carcinoma de células de transición): tipo de cáncer que comienza en las células uroteliales que recubren el interior de la vejiga

Otros tipos de cáncer pueden comenzar en la vejiga, pero son mucho menos comunes, como:

• Carcinoma de células escamosas: tipo de cáncer que es muy invasivo
• Adenocarcinoma: tipo de cáncer en el que las células tienen mucho en común con las células formadoras de glándulas de cáncer de colon. Casi todos los adenocarcinomas de vejiga son invasivos
• Carcinoma de células pequeñas: tipo de cáncer que comienza en células similares a los nervios llamadas células neuroendocrinas. Estos cánceres a menudo crecen rápidamente y, por lo general, deben tratarse con quimioterapia como la que se usa para el carcinoma de células pequeñas del pulmón
• Sarcoma: tipo de cáncer que comienza en las células musculares de la vejiga, pero son poco frecuentes

Varios factores de riesgo hacen que una persona tenga más probabilidades de desarrollar cáncer de vejiga. Algunos de ellos pueden controlarse con una dieta saludable, mientras que otros no pueden controlarse, como por ejemplo, el sexo o la edad. Los factores de riesgo en el cáncer de vejiga pueden incluir:

• Fumar
• Exposiciones en el lugar de trabajo
• Ciertos medicamentos o suplementos herbales
• Arsénico en agua potable
• No beber suficientes líquidos
• Edad
• Sexo
• Irritación e infecciones crónicas de la vejiga
• Antecedentes personales de vejiga u otro cáncer urotelial
• Defectos de nacimiento de la vejiga
• Genética e historia familiar
• Quimioterapia previa o radioterapia

Los principales signos y síntomas del cáncer de vejiga son:

• Sangre en la orina
• Cambios en los hábitos de vejiga o síntomas de irritación
• Tener que orinar con más frecuencia de lo habitual
• Dolor o ardor al orinar
• Sentir que necesita orinar incluso cuando la vejiga no está llena
• Tener problemas para orinar o tener un flujo de orina débil
• No poder orinar
• Dolor en un lado de la parte baja de la espalda
• Pérdida del apetito y pérdida de peso
• Sentirse cansado o débil
• Hinchazón en los pies
• Dolor de huesos

Las tasas de supervivencia en el cáncer de vejiga están directamente relacionadas con la etapa en que se clasifica al paciente, notándose una disminución progresiva de las posibilidades de que el paciente sobreviva, dependiendo de cuán avanzado esté el tumor. La tasa de supervivencia relativa a 5 años para las personas con cáncer de vejiga en estadio I es de aproximadamente el 88%, aproximadamente el 63% en el estadio II y más o menos el 50% en el estadio III.

El cáncer de vejiga que se ha diseminado a otras partes del cuerpo a menudo es difícil de tratar. El cáncer de vejiga en estadio IV tiene una tasa de supervivencia relativa a 5 años de aproximadamente el 15%. Sin embargo, a menudo hay opciones de tratamiento disponibles para las personas con esta etapa de cáncer.

IMPORTANTE: EL DIAGNÓSTICO PRECOZ DEL CÁNCER ES DE VITAL IMPORTANCIA DEBIDO A QUE UN CÁNCER DIAGNOSTICADO EN UNA ETAPA TEMPRANA ―ANTES DE QUE HAYA CRECIDO DEMASIADO O SE HAYA PROPAGADO A OTRAS ZONAS DEL CUERPO―, TIENE MAYOR PROBABILIDAD DE SER TRATADO CON ÉXITO. POR CONTRA, SI EL CÁNCER SE HA DISEMINADO A OTROS ÓRGANOS, SU TRATAMIENTO SE HACE MÁS DIFÍCIL, Y GENERALMENTE LA PROBABILIDAD DE SUPERVIVENCIA ES MUCHO MÁS BAJA.

Con el propósito de diagnosticar el cáncer de vejiga se han desarrollado algunas técnicas como la imagen de cistoscopia, el análisis de biopsia, la citología de orina y pruebas de imagen, como la tomografía computarizada. Sin embargo, algunos de éstos pueden ser estresantes o incluso perjudiciales para el paciente y se deben desarrollar nuevos métodos.