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Tubo de laboratorio para prueba de insulina

Insulina: la hormona de la función endocrina del páncreas

Autor: Adrià Roca

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Fecha de publicación:

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Tiempo de lectura: 6 min

¿Qué es la insulina?

La insulina es una hormona secretada por las células beta-pancreáticas, que componen parte de la fracción endocrina del páncreas. La principal función de la insulina consiste en promover la degradación de la glucosa por parte de las células para generar energía, así como también promueve su almacenaje. Más en concreto, las funciones de la insulina consisten en:

    • Promover la entrada de glucosa en las células
    • Promover la glucólisis (degradación de glucosa)
    • Promover la glucogénesis (síntesis de glucógeno)
    • Promover la síntesis de proteínas
    • Promover la síntesis de lípidos
    • Inhibir la gluconeogénesis (síntesis de glucosa)
    • Inhibir la degradación de proteínas

Cuando los niveles de glucosa aumentan en sangre, las células beta-pancreáticas comienzan a secretar insulina a la sangre para promover su entrada a las diferentes células del cuerpo, donde será degradada para obtener energía o será almacenada en forma de glucógeno. Muchas órganos y tejidos del cuerpo contienen receptores de insulina, aunque estos son más abundantes en el hígado, el músculo esquelético y el tejido adiposo. Una vez los niveles de glucosa en sangre han disminuido, la insulina es degradada.


La insulina es sintetizada inicialmente como una prohormona conocida como preproinsulina, que al perder su extremo N-terminal pasa a ser proinsulina. Seguidamente, la proinsulina es sometida a un proceso de digestión a través del cual se libera uno de sus 3 fragmentos. Los otros dos, aunque no son contiguos en secuencia de aminoácidos, quedan unidos covalentemente por puentes disulfuro, dando lugar a la insulina en su forma activa, mientras que el fragmento restante es conocido como péptido C, cuya función exacta es desconocida, pero se cree que está implicado también de algún modo en el metabolismo de la glucosa.


Los niveles de insulina en sangre suelen incrementar considerablemente justo al iniciar la ingesta de alimentos, en el momento exacto en el que se detecta un considerable aumento de los niveles de glucosa en sangre. En cambio, en ayunas los niveles de insulina suelen ser mucho más bajos, pero no suelen ser nunca nulos, ya que el páncreas mantiene constantemente una secreción basal de insulina. Este equilibrio entre los niveles de glucosa e insulina en sangre permite establecer un control muy fino y riguroso del metabolismo de la glucosa.


Alteraciones en la secreción de insulina pueden dar lugar a diversas enfermedades, siendo la más importante la diabetes. Existen dos tipos principales de diabetes:

    • Diabetes mellitus de tipo 1: es una enfermedad autoinmune en la cual el sistema inmunitario ataca y destruye a las células beta-pancreáticas. Como consecuencia, la producción de insulina desciende considerablemente y aumentan de manera muy rápida los niveles de glucosa en sangre
    • Diabetes mellitus de tipo 2: es una enfermedad asociada a la obesidad. Mediante una serie de mecanismos complejos, las células cesan de responder a la insulina, provocando así una alteración conocida como resistencia a la insulina, y la glucosa se acumula en la sangre. Inicialmente, las células beta-pancreáticas producen mucha más insulina para corregir los niveles de glucosa, pero a medida que la enfermedad avanza, se llega a un punto en el que la cantidad de glucosa acumulada es tan grande, que la insulina que se produzca es insuficiente para corregirla. De esta manera, si la resistencia a la insulina no es tratada a tiempo, la condición progresa a prediabetes y a diabetes mellitus de tipo 2, en la que la producción de insulina es totalmente insuficiente para corregir los niveles de glucosa. La progresión de la diabetes de tipo 2 es mucho más lenta que la de tipo 1, pero debido a la pandemia global de sobrepeso y obesidad que hay, su prevalencia es mucho más alta y alarmante

Cambios en los niveles de insulina

Niveles altos y bajos de la insulina en ayunas pueden llegar a ser patológicos. En este sentido, se pueden destacar las siguientes condiciones:

    • Hipoinsulinemia: provocada por bajos niveles de insulina en sangre
    • Hiperinsulinemia: provocada por altos niveles de insulina en sangre

La hipoinsulinemia suele estar relacionada con una producción deficiente de insulina por parte de las células beta-pancreáticas. Se trata de una condición típica de pacientes de diabetes mellitus de tipo 1, en los que se suele observar también un considerable incremento de los niveles de glucosa en sangre. Por otro lado, también existen otras enfermedades que dañan el páncreas y pueden resultar en hipoinsulinemia, como otras alteraciones autoinmunes o ciertos tipos de cáncer.


Por otro lado, la hiperinsulinemia suele ser muy típica en pacientes de resistencia a la insulina, prediabetes o que se encuentran en estadios tempranos de diabetes mellitus de tipo 2. En pacientes de resistencia a la insulina, las células beta-pancreáticas aumentan la producción de dicha hormona para corregir los niveles de glucosa en sangre. Los niveles de insulina siguen aumentando considerablemente durante la prediabetes, pero cuando la enfermedad progresa a diabetes mellitus de tipo 2, los niveles de insulina en sangre descienden considerablemente. La hiperinsulinemia suele venir asociada con hipertensión, obesidad, dislipidemia (altos niveles de lípidos en sangre) e intolerancia a la glucosa. En muy raras ocasiones, la hiperinsulinemia puede venir provocada por la presencia de insulinomas, que son un tipo de cáncer muy poco común que afecta a las células beta-pancreáticas y producen insulina en exceso. Los síntomas de la hiperinsulinemia suelen incluir:

  • Debilidad muscular
  • Confusión
  • Cansancio
  • Ansiedad
  • Incapacidad para la concentración
  • Problemas visuales, incluyendo visión borrosa o visión doble
  • Dolor de cabeza
  • Agitación
  • Exceso de sed

¿Qué es la prueba de la insulina y qué significan los resultados?

La prueba de la insulina suele realizarse mediante la determinación de los niveles de dicha hormona en sangre. Resultados bajos de insulina suelen ser indicativos de diabetes mellitus de tipo 1, mientras que resultados altos de insulina suelen indicar resistencia a la insulina, prediabetes y fases iniciales de la diabetes mellitus de tipo 2.


Aun así, los resultados de la insulina suelen ir acompañados de la determinación de los niveles de glucosa. En la diabetes mellitus de tipo 1, la insulina suele estar baja, mientras que la glucosa está muy elevada. En cambio, en la resistencia a la insulina, es la insulina la que genera resultados más elevados que la glucosa. En la prediabetes, los niveles de insulina respecto a los de la glucosa siguen aumentando todavía más, pero en la diabetes mellitus de tipo 2, la insulina desciende considerablemente y aumenta la glucosa.


Por otro lado, en el diagnóstico de la diabetes, se suelen incluir también otras determinaciones que permiten examinar el abasto de la diabetes y sus consecuencias derivadas del síndrome metabólico o su impacto en la función renal del paciente. Dichas determinaciones incluyen:

  • Creatinina en suero y en orina
  • Albúmina en orina
  • Colesterol total
  • Colesterol de HDL
  • Colesterol de LDL
  • Triglicéridos
  • Urinanálisis

Además, en pacientes diabéticos que se están tratando mediante la inyección exógena de insulina, se suelen medir los niveles de péptido C para evaluar su función endocrina pancreática. Esto se debe a que, en estos casos, la determinación de la insulina no permite saber si es endógena o exógena.

Resumen

La insulina es una hormona secretada por las células beta-pancreáticas, que componen parte de la fracción endocrina del páncreas

La principal función de la insulina consiste en promover la degradación de la glucosa por parte de las células para generar energía, así como también promueve su almacenaje

La hipoinsulinemia suele estar relacionada con una producción deficiente de insulina por parte de las células beta-pancreáticas

La hiperinsulinemia suele ser muy típica en pacientes de resistencia a la insulina, prediabetes o que se encuentran en estadios tempranos de diabetes mellitus de tipo 2

Autor

Foto de Adrià Roca

Adrià Roca

Graduado en Bioquímica con máster en Bioquímica, Biología Molecular y Biomedicina, con mención en Biomoléculas en Investigación Biomédica. Previa experiencia como Técnico de Laboratorio en Althaia (Hospital Sant Joan de Déu, Manresa). Trabajo de Fin de Máster desarrollado en la Unitat de Biofísica (Universitat Autònoma de Barcelona), el sincrotrón ALBA y en el Centre de Recerca de l'Hospital de la Santa Creu i Sant Pau. Actualmente trabajando como Director de Ciencia y Regulatoria en Blueberry Diagnostics.

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